MÁS DE TI
Envuelta en el crepúsculo de esta noche tibia y silente
te evoco, respiro el aroma que se aloja en mi memoria,
mezcla dulce que mortifica entre la tiniebla amatoria
en esta añoranza eterna que me acongoja intransigente.
Invoco difuminada tu silueta en la oscuridad,
lentamente le voy dando luz… luminiscencia a tu ser
que perfila amante anhelante de caricias por doquier,
intangible… etéreo, ¡Muy mío! Rendido a mi ansiedad.
Te necesito, para saciar la sed de amarte otra vez
y sorber cada gota de tu pasión desencadenada,
y en mi alma desaparezca la árida tortura ahondada,
originada por tu ausencia y tus besos en escasez.
En la inventiva peregrino beso a beso, despaciosa
para ahitarme de la benignidad que mi boca enjuga,
de sosegar el frenesí que me atormenta y me subyuga
en el regocijo de recrearte en mi lecho; agoniosa.
Asfixiar esta apetencia de caricias aquilatadas,
desenfrenar la tormenta que bañe mis colinas, mi alma
que desvaría circunspecta cada noche y me desalma.
¡Quiero embelesarme de todas tus ternezas abnegadas!
Si en mis sueños yo te pierdo, tras el ingrato cendalí,
como te pierdo en la realidad, prefiero estar despierta
y soñarte una y mil veces más; amándote como experta
hasta que extenuado te duermas reposado sobre mi .
Amanece mi soledad… y con la luz del nuevo día,
tarda se diluye tu figura entre las sabanas blancas
y de mi libidinoso pensamiento te desarrancas.
Naufrago en el desconsuelo de no tenerte en mi abadía.
Con la vehemencia de este amor indómito que te extraña
intento retenerte un poco más… te abrazo lastimera,
para desleírme en el caudal que sofocará la hoguera
que requema y arde impetuosa en la fosa de mis entrañas.
Acallo la hambruna mísera en este delirio febril
que mitiga la sed de beberte incluso en la lontananza.
Exánime caen mis ojos, abatida en la añoranza
de hacer el amor con tu recuerdo en esta noche de abril.
Irene Vergara
Derechos de autor
2010
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