martes, 15 de enero de 2013

SUEÑOS ROTOS

SUEÑOS ROTOS



¡Sueños que germinan…!
a la luz de un pálido reflejo
que titila, al compás de un corazón
perturbado de nuevas emociones
que fluyen como adagio.

¡Sueños que se arraigan…!
y dejan huella en la memoria,
de ese sentimiento vivo, que crece.
Y se escribe sólo con notas blancas
en la partitura del alma.

¡Sueños que florecen…!
con el rocío de la palabra pródiga,
que nace de lo profundo del sentir
nutriéndolos para que resistan
la borrasca, si la lluvia arrecia.

¡Sueños que se quiebran…!
entre la desidia y la displicencia
que se oculta entre negros velos,
y con el argumento satírico,
se rompe en mil pedazos la ilusión.

¡Sueños que se pierden…!
en la lúgubre torre del olvido
mutilados por el filo de la hipocresía.
Sólo quedan en la memoria registrados,
como una inconclusa melodía.



Irene del Carmen Vergara
Junio 2012



lunes, 14 de enero de 2013

NO TEMAS...


NO TEMAS...



Cuando dices “no me olvides”
con esa voz tan llena de mansedumbre…
con la mirada compruebo
que todo mi espacio
está lleno de ti…

No sólo lo digo por las cosas
que guardan un instante preciso.
Sino, porque desde que tu nombre brotó
en la primavera de mi vida
iluminando mis días como un sol
relumbró la lozanía de mi jardín
y soterrado se instaló en mi mente
en un recoveco del laberinto.
Perseverante y silencioso
el paso del tiempo soportó.

¡Que no te olvide! Dices…
¿¡Cómo podría!?

Si cayeron las hojas del calendario
como las hojas de ¡tantos otoños!
y volvimos a encontrarnos
al doblar la esquina de la mocedad
en ese ir y venir de la vida
por las calles grises de la ciudad
donde se emulan los individuos
como entes sin esencia.

Y al volver a verte
un candil se encendió en mi pecho
para alumbrar la sonrisa
que retoñaba en mi memoria
como un nuevo amanecer,
un amanecer efímero…
tan breve como vida de mariposa.
y aun así… ¡no te olvidé!

Y hoy, quiero que sepas,
para que el temor no haga nido en tu fronda.
Ahora que nos alumbra la vida
este dorado y cálido sol otoñal,
que ya no es posible el olvido
cuando se ha compartido ¡tanto!

Días de recia tempestad
en que por poco naufragamos
en la vorágine de mi sentir.
Días de bonanza
pintados con los matices que solo el amor
reposado y maduro produce
bajo un diáfano cielo azulado.
¡Momentos que se han escrito
con tinta indeleble en el corazón!

Pronto llegará nuestro invierno
con sus vientos huracanados de afección
y resistiremos juntos la nevisca
que nos cubrirá de blanco los cabellos,
y en tus brazos amorosos
junto a tu pecho sentiré el calor
que me brinda tu amor benevolente.
¡Deja el desasosiego!
para vivir el resto de nuestros días con plenitud.
¡No temas que aquí me quedaré!
Pero tú,
tú mi dulce bien
¡Tú, no te vayas sin mí!



Irene del Carmen Vergara
Derechos de Autor
Mayo 2012


domingo, 13 de enero de 2013

¡VEN!


¡VEN!

El sol se ha perdido en el horizonte,
un manto de sombras reviste el día
y la luna que emerge sobre el monte,
con luz de plata, baña el alma mía.

Ejerce en mí una enigmática influencia
y acrecienta mi libido escondido.
¡Ilumíname con tu refulgencia
cuando la noche tibia haya caído!

Cuando la luna suba mi marea
¡Ven! ¡Atrévete a remontar mis olas!
Atrévete a vivir esta odisea,
y haz que explote como las fumarolas.

Descubre ahora, el secreto de la luna,
y yo... ¡ Yo te amaré como ninguna!


Irene del Carmen Vergara
2012