sábado, 28 de enero de 2012

UN GRAN AMOR


UN GRAN AMOR



Hace mucho que mi corazón alberga
la más hermosa y secreta creencia…
Un sentimiento de certeza, sobre el significado
llevo colgada en el pecho, como afirmación verdadera.
¡Es esa fuerza poderosa que hace posible lo imposible!
Y que moldea tan calladamente nuestra existencia.

He buscado con tenacidad la esencia
de un querer dogmático y absoluto
que posea como atributo, mansedumbre y benevolencia;
para sentir en plenitud vibrar mi corazón,
y comprender mirando desde su ventana
los defectos y virtudes del ser amado,
más allá de sus antifaces con los que recorre el mundo.

Para compartir con ternura los sentimientos,
los temores que acechan, las carencias y esperanzas;
que seamos capaces de reír con las alegrías,
y llorar juntos ante las tristezas y el dolor.
Que nos revelemos uno al otro con la verdad desnuda,
para descubrir al ser que habita en nuestros cuerpos
y disfrutar del privilegio de ser uno mismo;
Que al mirarse a los ojos, encontremos el alma
para ofrecer en ese momento, ¡todo lo que somos!

Y que florezca el compromiso voluntario, ¡sin cadenas!
Entregar coraje cuando la debilidad asoma
y tomándose las manos transmitir el amor que se siente,
como una energía esencial para vivir en unión.
Amarse con la mirada, ¡con la sonrisa…!
¡con el abrazo y la caricia! con el beso y la palabra
que nace en lo más profundo de nuestro ser.
Ese sentimiento que da fortaleza para amar sin límites,
sin fronteras ni temores y poder apreciar sin miedo
las facetas luminosas y los lados sombríos de cada cual,
como una manifestación palpable de esa esencia
trascendental e intangible que llamamos ¡Amor!

¡Un Gran Amor!



Irene del Carmen Vergara
Derechos de Autor
Noviembre 2011


viernes, 6 de enero de 2012

OSCURIDADES II






OSCURIDADES II



Emerjo desde las profundidades de mi abismo hacia la luz…
lentamente mis tinieblas se fueron adaptando a la luminiscencia
de un sentimiento puro, cristalino como las aguas que emana la
vertiente de la montaña; como si fuera una lagrima de la tierra
deslizándose en la escarpada superficie de su corteza…

Flotando en la barcaza de emociones que el sentir produce,
me quedo sintiendo la brisa…
¡Cúmulos de caricias que mi alma adormecen!
Arrulladas en el aroma de días venturosos…
ráfagas de sensaciones que despiertan un sentir distinto,
¡Único y maravilloso!

Me dejo caer con los brazos extendidos mirando el infinito azul
del cielo, subyugada ante la magnificencia de la creación divina,
para que penetre por mis poros hasta mis entrañas y restablezca
el orden en el caos en que se encuentran.

Espero que los rayos del sol traspasen la epidermis aterida,
¡Necesito tanto ese calor! Para que abrigue mi carne y mi alma
que se fractura con el paso del tiempo, con las vivencias que quedan
prisioneras en el hielo de la inconciencia, produciendo temores…
Temores que acallo, pero que surgen como espinas lacerando
el sentimiento nuevo que germina.

Y este sentir subterráneo que me abruma, cubre mi cuerpo de
lúgubres atuendos… ¡Temor! Energía que contrae mis esperanzas,
que cierra las puertas de un mañana… que huye, acumula y daña.
¡El que se aferra a todo lo que amo!
El temor que prohíbe, que duele y ataca.

Mas yo quisiera que esa luz de energía que expande,
que abre mil puertas, que revela, comparte y sana,
permaneciera en mi vida como una sanación que repare mi alma…
y me permita habitar con el alma desnuda, libre y feliz.

Sueño que las noches sean tan bellas como los días, que las sombras
sólo sean la débil potencia de la luz, reteniendo el calor…
para que la escarcha de la soledad y la tristeza no se aposenten
¡Nunca más en mí!

Otra vez este sentir me sumerge en las profundidades de lo prohibido;
del descenso suicida, que libere mi alma de esta incertidumbre
que me consume.
Agito mis manos en la negrura submarina para torcer el destino
de permanecer prisionera en los fríos muros de esta soledad
que hiere… que marchita… y aniquila.


Irene del Carmen Vergara
Derechos de Autor


PALABRAS DE AMOR

PALABRAS DE AMOR


En las largas noches de desvelo
tu nombre llena mi pensamiento,
brinda calidez a mi aposento
si al silencio mi amor le revelo.

Por sentirte cerca tengo anhelo
de escucharte decir un te quiero,
dulces palabras que ansiosa espero
que en la distancia sean consuelo.

¡Y te siento tan enamorado!
En los versos que tu voz me regala,
es amor que tu corazón exhala
complacido de sentirse amado.

En mi pecho se ahoga un suspiro
me bañan cual lluvia tus palabras,
y el silencio de mis noches labras
con ese te quiero que respiro

Mi alma rebosa de complacencia
tengo los sonidos definidos
es música tu voz en mis oídos
por el tiempo que dure tu ausencia.

Me nubla los ojos la emoción,
¡Mi pecho se llena de ternura!
de vivir esta bella locura
que nos inunda el corazón.



Irene del Carmen Vergara
Derechos de Autor